jueves, 23 de agosto de 2012

Cotilleos sobre Cervantes

   Con un nombre como  el de Miguel de Cervantes Saavedra no se podía ser mesonero, pastor o conductor de carromatos, era sin duda un nombre de literato. Aunque si nos ponemos a indagar en la vida de este gran escritor como si fuéramos Jorge Javier Vázquez en uno de sus programas "culturales" comprobaremos que D. Miguel de Cervantes fue un ser humano, que pese a representar lo máximo de las letras hispanas, llamado hoy en día "Príncipe de los Ingenios", no deja de tener una vida llena de peripecias, de altibajos y de esfuerzos por sobrevivir a la vez que de deseos de llegar a ser un gran poeta o dramaturgo, su gran sueño.
   Bien dice esa frase que "la vida es lo que te sucede mientras estás planeando algo totalmente diferente", la novela moderna estaba naciendo de su mano, el autor más grande, el que más influencia tendría en la literatura universal se estaba forjando, mientras corría por sus venas el germen de la frustración, por no alcanzar con el teatro el éxito que si alcanzó su rival, Lope de Vega.
   Cervantes nació ya con problemas económicos, su padre un cirujano-barbero profesional sin título, una especie de prácticante de los de antes, saltaba de provincia en provincia intentando buscarse la vida para mantener a su mujer y a sus hijos. Con semejante panorama tenemos al creador del Quijote alistándose en el ejército en busca de una vida respetable y una remuneración que le permitieran vivir dignamente.
   No vamos a decir que era el hombre con más suerte del mundo la profesión de soldado le dejaría dos grandes secuelas: una mano inútil y un cautiverio durante cinco años en los que según sus palabras que dejó impresas en alguna carta, aprendió a tener paciencia.
   Tuvo una única hija Isabel con la mujer de un posadero y vivió un matrimonio fugaz con Catalina de Salazar que le duró tan solo dos años. Después de este intento de ser un hombre común se hizo recaudador de impuestos y anduvo por toda Andalucía recogiendo esos dineros, pero también conociendo a todo tipo de gente de cualquier clase social lo que le hará conocer mejor la psicología humana, algo que se verá reflejado posteriormente en sus obras.
   Volvió a estar en la cárcel por apropiarse de parte del dinero recaudado y también por un asunto turbio en el que estaban involucradas sus hermanas, llamadas vulgarmente "las cervantas".
Nos cuesta creer que  ese hombre al que han pintado en algún cuadro tan serio, vestido de negro, cuello blanco, pluma en mano, del que tenemos la certeza de que tenía una mente maravillosamente privilegiada pudiera tener una vida llena de baches y sobresaltos.
   Tal vez su genialidad partía de ahí de sus vivencias. Indudablemente  era un hombre que pertenecía al mundo de los vivos, de los que son curiosos y necesitan probar todos los sabores. Miguel de Cervantes, que no era universitario, sacó lo mejor de la experiencia, de la gente que conoció y de los sitios que visitó. De ahí la importancia que siempre se le da a la escuela de la vida, en él es un hecho transformado en palabra, en novela.
   Y ahí quedó toda su obra muy extensa. Aunque su novela más conocida la más alabada, traducida y por supuesto leída: El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha, nos ofrece un héroe endeble que va por los caminos resolviendo problemas imaginarios con un caballo flaco, un ayudante rechoncho con pocas luces, que se va quijotizando poco a poco y que sin saber porqué, siempre encontramos algo en ese loco con lo que nos identificamos en cada lectura.
   La respuesta sobre esta similitud que encontramos entre Don Quijote y nosotros me lo dió mi padre una tarde en que le pregunté que qué tal le iba y me contestó: -aquí vamos, luchando contra los molinos.
Me hizo pensar en que todos somos un poco "quijotes" y que cada uno tiene sus propios molinos.

8 comentarios:

  1. Me ha encantado!!...Y como la cosa va de cotilleos..chacha! ahora entiendo de Dulcinea le diera calabazas...
    Una vez mas gracias..he aprendido cosas que no sabía del Don Cervantes..

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  2. Muy interesante. Está claro que aprendemos muchas de las cosas no solo estudiando, también en la calle o, experimentando en cualquier campo que te guste.
    Además, me parece que para la época en la que vivió, el Quijote era un libro muy creativo y moderno.
    Un abrazo.

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  3. POR fin me animo. Y no porque este artículo sea el mejor que has publicado. Ni el peor. Y es que lo de las calificaciones nunca se me sió muy bien. Quizá por eso no ejerzo como maestro, mi querida colega y amiga... Y si por fin me animo-aparte de porque he encontrado el huequecillo entre mi pereza- es porque Cervantes, desde que lo conocí a través del Capitán Alatriste, ha sido y será un de mis personajes reales e imagnarios favoritos. Esa mezcla entre canallesca y caballerosa, entre genio de las letras y espadachín de fortuna, me recuerdan a mí mismo. Salvo que yo no tiro de espada, y ni mucho menos soy un genio de las letras (ni de nada). Pero tengo algo de truhán y algo de señor. De caballero a la antigua y si se tercia, de pícaro canalla.Tan géminis y tan español yo... Y tuvo que ser Cervantes quien trajera mi pluma(e-pluma en este caso)hasta tu blog. Que mis ojos ya lo disfrutan desde el comienzo.
    Siga pues deleitándonos con su delicada prosa, fermosa Dulcinea. Y hágalo en paz, voto a tal...Que, si se viera vuesa merced en necesidad de ello, no dude que pondré mi toledana a su servicio para desfacer cualquier entuerto. Quizá no sepáis a donde vais, pero vive Dios, que vais por buen camino.
    JORGE GIMENO ORTIZ.

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    1. El que dice esas palabras, no podía ser otro que un buen amigo del famoso Don Quijote de la Mancha, desfacedor de agravios, enderezador de entuertos, el amparo de las doncellas, el asombro de los gigantes y en vencedor de las batallas. Y espero que este camino, sin saber donde me lleva, lléveme a la alegría y a la de todos los que a mí, osen leerme.

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    2. Pues sí, Bea, mi fermosa Amiga. Buen amigo del ingenioso hidalgo. Y de su estilo de vida. Perseguidor del horizonte, de hogueras en el mar. Y firme creyente de que "valen más volando"...

      Mil besos

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  4. está claro que el hombre era un "buscavida" lo que somos muchos ahora...gracias por enseñarme tantas cosas, amiga!!!

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  5. Cervantes fue un hombre que vivió y que aprendió de lo vivido o al menos supo sacarle partido. Espero poder decir eso algunos día. Un beso, genial como siempre.

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  6. Cervantes no hablaba español. Escribio el quijote con google traductor :)

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